BRUSELAS--(BUSINESS WIRE)--Ninguna otra industria ha sufrido tanto el impacto económico de la pandemia como la industria hotelera. Dada la importancia de este sector para la economía mundial, debe seguir siendo una prioridad con recursos asignados como corresponde. Anheuser-Busch InBev ("AB InBev") ha trabajado estrechamente con empresas del sector hotelero durante años, en particular con sus numerosas pequeñas y medianas empresas (pymes) vulnerables, lo que le ha proporcionado información valiosa sobre cómo protegerlas durante las crisis.
A continuación, se indican algunos pasos fundamentales para garantizar que las pymes del sector hotelero sobrevivan a la COVID-19:
- No causar más daño: Las medidas futuras no deben aumentar la carga sobre los vulnerables.
- Fomentar un entorno empresarial predecible: Los gobiernos deben brindar claridad y previsibilidad con respecto a las expectativas futuras para permitir que las empresas eviten la situación de “yoyó” de gastar dinero para reabrir y luego verse obligadas a cerrar nuevamente.
- Implementar un enfoque táctico para la recuperación: Los gobiernos deben tomar medidas para optimizar la reapertura del sector hotelero a la vez que evitan un alto riesgo de COVID-19, como prevenir cierres o desalojos mediante subsidios de alquiler, otorgar créditos fiscales a las pymes más vulnerables o ayudar a las pymes a adoptar formas viables de comercio electrónico.
- Fomentar la colaboración entre industrias: El sector deberá desarrollar un ecosistema de apoyo que recurra tanto a los gobiernos como a las empresas privadas y las organizaciones multilaterales. Las asociaciones público-privadas también pueden fomentar la recuperación del sector, ya que las empresas de bienes de consumo empaquetados (consumer packaged goods, CPG) desempeñan un papel fundamental en la industria. Sus conexiones con empresas locales formales e informales deben utilizarse para apoyar a las pymes.
Las pymes hoteleras de todo el mundo comparten muchos desafíos relacionados con la pandemia, incluida la gama de restricciones impuestas externamente que cambian rápidamente y que paralizan las posibilidades comerciales. La prohibición absoluta de productos como el alcohol, que representa un tercio de los ingresos e incluso más beneficios, también ha resultado un desafío.
Este desafío global se presenta en una industria esencial que genera el 10 % del empleo a nivel mundial, lo que hace que su declive sea peligroso. El Banco Mundial estima que otros 150 millones de personas podrían caer en la pobreza extrema en todo el mundo en 2021, lo que borraría más de tres años de reducción de la pobreza mundial.
Si no se establecen políticas coordinadas y a largo plazo para reactivar la atribulada industria hotelera, y las pymes en su núcleo, este declive podría persistir y alimentar una recesión mundial. Incluso cuando la pandemia cede, los legisladores deben tomar medidas para equipar mejor a las pymes y, así, proteger nuestra economía global.
Para obtener más información sobre AB InBev, visite www.ab-inbev.com.
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